Las altas temperaturas han adelantado la producción de este vino joven, muy arraigado al otoño, que ya está disponible en la bodega umbreteña.
Ha sido nuestro asociado, Bodegas Salado, la que ha dado el empujón de salida a comercializarlos. «Son el resultado de una uva más sana que nunca. La producción ha sido corta pero de excelente calidad», declara Rafael Salado, uno de los propietarios de esta bodega.
Bodegas Salado, que posee aproximadamente unas 70 hectáreas de Garrido Fino, ha vuelto a recurrir un año más a la vendimia nocturna que, según Salado, garantiza la frescura e idoneidad de la uva. La bodega produce anualmente entre 500 y 600 mil litros de mosto, que ya puede adquirirse en sus puntos de venta habituales y en una recién estrenada tienda, sita en sus instalaciones, pero con entrada directa desde la calle. «Hemos adecentado el antiguo lagar, dejando descubierto el ladrillo visto que le da un toque muy elegante», comenta Rafael Salado. Este espacio, de mayor dimensión y amplitud que el anterior, permanecerá abierto de lunes a domingo de nueve de la mañana a dos de la tarde.
Vía: Cosas de Comé
